UNA MALA Y UNA BUENA
Como siempre, así es el Péndulo


Siempre deseamos comenzar por las noticias malas, debe ser porque terminar con la noticia buena nos deja un gusto a consuelo, a “no está todo perdido” y así es, así que comenzaré por las desdichas, qué en realidad no son malas noticias: Bombyx Mori despide a un integrante, es Fitzroya quien se va a estudiar composición a Alemania. La noticia para él es excelente y de hecho nos alegramos profundamente por verlo volar y crecer, pero en términos reales nos deja un vacío complicado dentro del grupo. La fortaleza del grupo está en su aporte ya que él produce todo el soporte electrónico y “telúrico” que le da la presencia a nuestro sonido en vivo. Ahora sólo quedamos tres integrantes, Ciriaco, Knöll y yo. El proyecto sigue y hay que redefinirlo, queremos hacer nuestro tercer disco durante este año para lanzarlo en marzo o abril del 2008. El concepto está madurando, como el mosto en la barrica, ya descorcharemos un nuevo disco y nos daremos felices borracheras con canciones nuevas. Ahora, a trabajar, que la ausencia de mi compadre Fitzroya se siente. Un abrazo gigante para él y su familia.

Bueno, ahora la noticia buena. Por fin, mis amigos blogueros de todo el mundo, ya tienen a su disposición el último disco de Bombyx Mori, “Jardines Sintéticos” porque este mes fue lanzado por nuestro sello Petroglyph Records en Estados Unidos. ¡¡¡Qué orgullo!!! Ahora lo pueden escuchar y comprar directamente desde su página web, de la forma más confiable y desde cualquier lugar del mundo.
http://www.petroglyphrecords.com/
no olviden nuestro MySpace:
http://www.myspace.com/bombyxmorichile
y nuestro sitio web oficial:
http://www.bombyxmori.scd.cl/

Este es el año de los cambios, le tengo mucha fe.
Giuseppe Tanino

AMISTAD SIN EDAD

Hoy quiero contarles un evento que me ha remecido desde la pupila hasta la sombra y que ha entregado una suave e incomprensible alegría a mi vida. Se trata del reencuentro con una antigua amiga. Lo realmente curioso de esta amistad es que surgió cuando ella tenía 9 años y yo 14, su nombre era Valeria Amanda…

Mi colegio era tan chico que nos conocíamos todos, desde los alumnos del kinder hasta los que estaban a punto de entrar a la universidad. Un día salí de clases para ir al baño (II medio) y veo que fuera de una sala hay una niña como de 9 años con cara furiosa, me cuenta que la expulsaron de la clase por contestadora, luego me comenta que está en clases de religión. Me pareció extraño que en una clase de religión se haya expulsado a una niña tan chica por “contestadora”, ¡qué habrá contestado! Bueh! así conversamos por largo rato, luego comenzamos a vernos en los recreos, a compartir la colación, a almorzar juntos, etc. De pronto nos convertimos en inseparables, nuestras conversaciones podían ser desde la contingencia política, religión, festival de Viña, pelar a los profesores, nuestras comidas favoritas y de lo que se nos ocurriera. La compañía de esta niña genial duró todo ese año 1987 y me parecía de lo más natural, incluso más entretenido que la mayoría de mis compañeros coetáneos. Hasta que comencé a detectar comentarios suspicaces en mi curso y también en el de ella. Un día lo conversé con mi hermano mayor y éste me aconsejó: no sabes como es la gente de malintencionada, quizás es mejor que te alejes de ella, involuntariamente le puedes ocasionar un daño si la sometes a los comentarios del resto, a las burlas de los niños que pronto comenzarían con el clásico “son novios”, además es posible que se te esté enamorando de verdad y eso no sería nada bueno.


Entonces me alejé así, sin más, entré en la universidad y no supe nunca más de ella. Lo único que conservo hasta el día de hoy es esta foto con su pandilla, (Valeria apoyada en el muro) y una pintura sobre lámina de cobre que me regaló y de la que no me he querido deshacer.

La semana pasada he dado con ella a través de una compañera de trabajo y, oh! sorpresa, es bloggera como yo, já! Le dejé un comentario en su sitio con el temor de que no se acordara o de que no le interesara saber de mí, pero ella respondió con emoción. El fin de semana tuvimos un encuentro mágico y fue loquísimo reconocer sus gestos, su espíritu, ver cómo se ha convertido en una mujer, cómo ha construido su vida sin saber de mi existencia y lo más hermoso es ver cómo sigue manteniendo su esencia “contestadora”. Hoy siento una alegría que no puedo explicar, creo que tengo una amiga nueva, o que la recuperé. Y todo lo que tenemos son esas curiosas conversaciones que nos dedicamos durante aquel año 1987.

Su blog se podría denominar “periodismo de uno mismo”. Si quieren conocer a este personaje notable pueden acceder por mis links.

Giuseppe Tanino

NO MÁS DÍA DE LA MUJER

Hoy se ha celebrado en el colegio donde trabajo el día de la mujer. Los chicos de III medio cantaron una canción, “Esa Mujer”; la directiva del colegio, llámese administrativos, entregaron una flor a cada una de las profesoras y secretarias (en mi colegio no hay alumnas, sólo varones); finalmente el Headmaster hizo un discurso para decir que las mujeres, en realidad, sí son importantes y que hay que agradecerles su labor diaria…

Ahora, estoy solo frente al computador y puedo decir lo que en realidad pienso, imaginar que puedo ponerme frente a una mujer que las encarne a todas y decirle lo que me gustaría expresar a cada una. Ahí va... ejem:

No soy más que tú, nadie lo es. Sabes que en mi naturaleza está el egoísmo y que el mundo ha escrito una historia llena de abusos. Aquí fui educado, por hombres y por mujeres más machistas que los mismos hombres. La costumbre y la inercia nos ha quitado la capacidad de reflexionar sobre cosas que son tan evidentes, y así sin quererlo he abusado también. Creo que te protejo cuando eres tú quien me protege, hasta en algún momento creí en el dicho que dice: “detrás de cada gran hombre hay una gran mujer” (que vergüenza) No quiero que estés detrás de mí, quiero caminar a tu lado, con admiración.
Ahora sólo puedo pedir perdón y prometer empatía profunda.
Por lo mismo, ya no celebraré el día de la mujer, celebraré tu vida como celebro la mía.

Giuseppe Tanino